La podemos encontrar en el Camino del Lligallo de Lorente, a unos 5 km al Sur de Amposta y cercana a la carretera nacional N-340.
Muy mal estado. En completo abandono. A punto de desplomarse la esquina meridional.
Esquina meridional.
La torre en medio de las fincas agrícolas.
Torre de planta rectangular (6 x 5’5 m) que conserva unos siete metros de altura, aunque es evidente que era bastante más alta. Los muros son de mampostería con sillarejos en las esquinas y el contorno de la puerta. Los sillarejos de las esquinas no llegan hasta lo más alto. La puerta se sitúa a nivel del suelo en su lado Sureste, con arco de medio punto con dovelas. Además de los restos de un matacán situado en la parte superior de esta fachada. En el interior destaca una bóveda de cañón en bastante buen estado y dos vanos situados en las esquinas del muro principal y que estaban destinadas al acceso a la parte superior de la torre.
Su origen puede estar en la necesidad de crear un nudo de protección de la zona (junto a las cercanas torres de la Oriola y de Forcherón) después de la devastadora incursión de los corsarios argelinos en 1540.
