Castillo de la Yedra

Emplazamiento increíble, en lo alto de un elevadísimo cerro cónico, que domina una extensión de terreno enorme con un paisaje montañoso bellísimo. Domina al pequeño pueblecito desde el Noreste. No presenta accesos ni senderos, por lo que hay que acceder campo a través. Aparte de la fuerte pendiente, su acceso no reviste demasiada dificultad porque la vegetación es escasa, simple hierba de pastos.

Muy mal estado. Los restos son muy escasos y a veces se confunden con las rocas. El abandono es total y su degradación constante.

 

 

Lugar donde creemos que debió estar la puerta original, en la parte Sur. Se observan las rocas de la izquierda, desde donde se podía batir a los atacantes que lograran penetrar en el interior del recinto.

Castillo roquero de planta irregular, con un solo recinto levantado sobre una gran roca, cuyo perímetro se dispone justo en el borde del cortado rocoso. Su longitud oscila en torno a los 68 m. y la anchura máxima es de 53 m. ocupando una superficie de 2.390 m2. Los restos mejor conservados se sitúan en el frente Norte, donde alcanzan una altura de 10 metros. Aparece una gran torre de planta rectangular y un pequeño cubo en un largo lienzo rectilíneo. Se dice que aquí estaba la entrada original, pero nos parece más probable que estuviera en el frente Sur. En este sector y en otros también se observan agujeros circulares de los mechinales que parecen un tanto artificiales. Que las torres y muros tuvieran mayores dimensiones en la parte Norte se debe, simplemente a que los cortados rocosos dejan de existir en esta parte, convirtiéndose en una empinada ladera. Muy empinada, sí, pero donde un ataque siempre se llevaría a cabo con mayor facilidad que en los otros sectores donde los atacantes se toparían con altas paredes de piedra. En cuanto al frente Sur, sus muros y cubos se confunden entre las rocas adaptándose a su disposición y utilizándolas como prolongación de ellas. Es decir, que con menos construcción de muros, mayor defensa se encontraban gracias a la altura de las rocas. También hay una parte oculta por unas enormes hiedras, que quizá son las que le dan nombre. En el frente Sur pudimos apreciar hasta restos de cuatro cubos, y lo que creemos que es la puerta original, pues está en el punto más bajo de la fortaleza, dando paso a un largo pasillo que puede ser batido con facilidad desde unas largas rocas en caso de entrada de atacantes. En el centro del recinto, exenta, y en el punto más alto, se levanta la torre del Homenaje, de planta rectangular y, como todo el castillo, en muy mal estado. Toda la obra conservada responde a la misma tipología y fábrica, por lo que su construcción se llevó a cabo de manera conjunta y unitaria. Grandes mampuestos y sectores de tapial.

 

 

La torre del Homenaje vista desde puntos distintos. Su equilibrio es peligrosamente precario

 

 

Frente Oeste. Aprovechando unos muros se ha construído una caseta donde se levanta una antena.

Gran torre Norte, la mayor y mejor conservada. Debajo vista desde el interior del recinto.

El castillo, desde el Sureste.

Fue una de las localidades que en el siglo XIV más sufrió la crisis demográfica a consecuencia de la peste y el hambre. En 1351, su fortaleza contaba con una guarnición de tres hombres. El rey don Pedro autorizó su repoblación con cien hombres procedentes de Alcaraz, eximiéndolos de todo impuesto. Fue efectivo pues en el siglo XV ya cuenta el castillo con 114 defensores, siendo uno de los más importantes del concejo de Alcaraz. Era su alcaide, en 1455, don Diego Ordóñez de Gamis. Los Reyes Católicos lo cedieron a don Pedro Manrique, conde de Paredes, arrebatándoselo al marqués de Villena, quién a su vez se lo había arrebatado al concejo de Alcaraz, lo que dio lugar a numerosas reclamaciones de Alcaraz. Actualmente, es propiedad del ayuntamiento.

Extraordinaria imagen del castillo de la Yedra con respecto a la pequeña población de Cotillas, mientras que detrás se observa la descomunal mole del cerro del Cambrón, de 1.550 metros de altura.

 

 

Lienzo Norte. La parte inferior es de mampostería, y la superior, de tapial.

 

 

 

Torre Norte con un pequeño cubo a su lado.

El castillo visto desde el Oeste. A la derecha, sobre un cerrete, aparece el campanario de la iglesia de Cotillas.