
Vista aérea. El círculo rojo señala el lugar del castillo. Como se puede ver, no hay caminos ni senderos cercanos. Tan solo por la izquierda aparece una pista desde la que intentamos acceder infructuosamente.
Sobre un abrupto promontorio rocoso de 310 m. de altura, invadiendo el cañón del Júcar, en lugar muy estratégico e intrincado. Se sitúa a unos seis kilómetros en línea recta aguas arriba del poblado viejo de Tous. Hay que tener en cuenta que antes de la construcción del pantano existía un camino que conducía, por las orillas del Júcar hasta Millares, pero todo quedó bajo las aguas. En la actualidad su acceso es imposible. Se puede llegar con vehículo hasta la Cueva de Pertecaste, en lo más intrincado de la sierra, y seguir unos minutos andando hasta el borde del barranco, cuando ya se divisa la Atalaya delante, pero la vegetación espesa y los cortados rocosos impiden por completo llegar hasta él. El único camino posible sería hacerlo con barca por las aguas del pantano.
Todas las fuentes consultadas se limitan a repetir lo mismo, pero desconocemos quién fue el primero en llegar. Desde el otro lado del barranco no se aprecian restos, incluso utilizando prismáticos.

En el centro de la imagen, la Atalaya.
Castillo roquero por su situación. Aunque no observemos ningún resto, la constitución del monte, así lo indica. Todas las fuentes, como ya hemos dicho, repiten que queda un muro relleno de tierra de un metro de altura y configurando una construcción de 20 m. de longitud por 3 o 4 de anchura. Pero ¿Quién lo confirma?
Desde el otro lado del barranco no se aprecia ningún resto.
