Castillo de El Tormo

Ruinas de la torre.

Sobre una colina rocosa que domina la pedanía de su nombre desde el Sur, entre este pueblo y la carretera de Onda. Curiosamente, no mantiene contacto visual con el castillo de Cirat. Se accede hasta sus restos por un sendero que comienza en el cementerio.

Muy mal estado. Apenas quedan restos. Se aprecian derrumbes recientes.

 

Pequeño castillo roquero asentado sobre una colina parcialmente cónica, con tajos verticales en su parte Sur. Consta de una torre de pequeñas dimensiones (4 x 3 m) rodeada por un pequeño recinto murado con algún cubo de refuerzo, pues en su flanco Este parece quedar la base de uno. Todos los restos poseen fábrica de mampostería.

 

Colina donde se alza el castillo, cubierta por pinares. Por la izquierda asoman las casas de El Tormo.

Aparece documentado por primera vez en el siglo XIII. Debió formar parte de los dominios de Ceit Abu Ceit, y luego de Ximénez de Arenós. Una vez extinguido el linaje de los Arenós pasó a manos de la Corona. Jaime II se lo concede a Guillem Solano. Pasa de nuevo a la Corona y finalmente es donado a los Vilarig, formando parte de la Baronía y Condado de Cirat, sede de los Vilarig.