Torre del Mocatero

Se alza sobre un cerro de 292 m de altura, a 7 km en línea recta de Escatrón y a 10 por carretera. Se puede acceder hasta ella por un caminillo que comienza en la carretera de Caspe, desde la que es visible. También recibe el nombre de Fortín del Mocatero.

En bastante mal estado. Tan solo quedan las cuatro paredes.

Interior de la puerta, situada en el primer piso.

Torre de telegrafía óptica perteneciente a la línea que, desde Zaragoza, comunicaba con Amposta por la margen derecha del Ebro. En todas las fuentes consultadas se indica que esta torre enlazaba con la torre homónima de Chiprana por el Este, y con la torre de Escatrón (desaparecida y de paradero desconocido) por el Oeste. Pero, sorprendentemente, durante nuestra visita, descubrimos que, desde esta torre, se ve con claridad la torre siguiente, es decir, el Fortín de Sástago. Por lo que desconocemos la función de la torre de Escatrón, si es que existió.

Interior de la torre. Entre las numerosas aspilleras se aprecia el lugar de la chimenea.

La torre vista desde la carretera de Caspe.

Se trata de una torre de planta cuadrada rodeada por un pequeño foso excavado en la roca. La torre se asienta al borde de escarpes verticales de gran altura por su parte septentrional, lo que hace innecesario el foso en este lugar. Está construida en mampostería reforzada con sillares en las esquinas y enlucida con yeso, tanto el exterior como el interior. Consta de dos plantas y una azotea protegida por un pretil con aspilleras, que se distribuyen según una estructura funcional común a toda la mencionada línea de torres. Destacan las dos hileras de aspilleras para fusiles, situadas en los dos pisos, a las que hay que sumar las que se abren en la terraza. En total, 48. La puerta, abierta en alto, a la que se accedía mediante una escalera provisional que salvaba toda la estructura del foso. También destaca la articulación de las fachadas mediante sendas bandas de sillares en los puntos de separación de los pisos, con una cierta voluntad estética. En el interior han desaparecido todos los forjados de madera, aunque aún son visibles los mechinales donde descansaban las vigas. Originalmente, la planta baja estaba destinada a almacén, a primera planta tenía la función de albergar la guardia y en la azotea se disponía el aparato de telegrafía óptica para la transmisión de los mensajes.

 

 

 

A la torre se puede llegar incluso con vehículo.

Durante la Tercera Guerra Carlista se construyeron en la segunda mitad de 1875, 45 torres ópticas que se extendían desde Zaragoza hasta Amposta a lo largo de la orilla derecha del Ebro. Fueron erigidas por mandato del general Manuel de Salamanca, que reorganizó la defensa del eje del Ebro contra los carlistas, y bajo la dirección técnica del capitán del cuerpo de Ingenieros Manuel Bringas Martínez. Todas ellas, salvo alguna excepción como el fortín de Sástago o la torre de Salamanca de Caspe, fueron similares.