En primer término se aprecia el basamento de un muro. Y al fondo, la estructura circular que semeja una torre derrumbada.
Sobre el cerro de su nombre, situado a unos 500 metros al Sur del pueblo. En una arista de este cerro existe un monumento en honor al santo homónimo, al que se puede llegar tras empinada escalera. Los restos de que hablamos están en la cima Oeste. Este cerro oculta la visión a los vigías del castillo hacia la parte meridional, es decir, hacia el camino de Cuenca. Es lógico, por tanto, la construcción de algún tipo de atalaya para tener buena visibilidad hacia esa zona.
Prácticamente desaparecida. Tan solo quedan vestigios.
Muro de mampuestos situado al borde de las rocas, perteneciente a la estructura rectangular.
Tan solo se distingue entre los derrumbes, una estructura de planta cuadrada de 16 m. de lado sobre la que se alza otra circular de 9 m. de diámetro realizada en mampostería caliza y calicanto. Nos atreveríamos a asegurar que era una torre con un recinto previo. Existen fragmentos cerámicos en superficie.
Cerro de San Cristóbal. Por la izquierda asoma el monumento al santo. Y al fondo, el caserío de Cañete.