En el centro del pueblo, en su parte alta, entre callejuelas estrechísimas.
Muy buen estado. Tanto la torre como la iglesia se encuentran en perfecto estado.
Torre atalaya del siglo XIV reutilizada como campanario de la iglesia en el XVII, caso bastante frecuente en tierras aragonesas. Tiene fábrica de sillería, con curiosas saeteras y estrechas aspilleras con derrame. Es de gran altura y hoy se remata por una sobria cornisa, con un cuerpo de campanas añadido muy posteriormente, de ladrillo y planta octogonal. Presenta planta cuadrada con 5 m de lado. Es muy parecida a otra torre campanario situada en la cercana localidad de Castel de Cabra. Se encuentra encajonada en un lugar muy angosto, por lo que es difícil apreciarla con nitidez.
