En la antigua granja de la Cartuja de Portaceli, convertida ahora en una gran finca privada llamada Masía de la Torre y que da nombre a una partida. Se encuentra al Oeste, en el límite del término, junto a la pista forestal que lleva desde la Cartuja a la carretera de Olocau.
La torre fue demolida en 1795.
En la actualidad se encuentra muy transformada, pues se trata de una finca agrícola equipada con los avances más modernos. No obstante, conserva la bodega gótica que construyó Bonifacio Ferrer. Se puede observar en ella una torre muy bien conservada que no tiene nada que ver con la original que dio nombre al lugar. Su construcción fue muy posterior.
Perteneció a los cartujos hasta 1845, año en que, tras la exclaustración, pasó a manos privadas.