Castillo de Añón

Lo encontramos en la parte alta del casco urbano de Añón, embutido entre las viviendas actuales y la iglesia.

El castillo fue dividido en varias viviendas, algunas se han mantenido en buen estado mientras que otras están en un estado lamentable. Aparte, toda el ala meridional está ocupada por un albergue rural. Es decir, que en un mismo edifico podemos encontrar todo el rango de conservación. Sea como fuere, no se pueden visitar, tanto unas como otras.

Flanco meridional. A la izquierda, la torre Suroeste, y a la derecha la torre-puerta. Esta parte alberga las instalaciones de un establecimiento hotelero rural.

Flanco septentrional. A la derecha, en el ángulo Noroeste del castillo, se observa la torre de mayores dimensiones, seguramente el Homenaje.

Castillo montano que presenta una curiosa planta rectangular (38 x 20 m) con una torre en cada una de sus esquinas. Pero es que estas torres son todas de dimensiones diferentes y cada una se ensambla con el castillo de forma diferente, por lo que vista la planta así, no parece muy regular que digamos. A ello hay que sumar una quinta torre, la torre-puerta, situada en su flanco meridional. Todas las torres son cuadradas o rectangulares, pero diferentes entre sí. La mayor o del Homenaje, ocupa la esquina Noroeste. Parece que es la más antigua y que en principio estuvo exenta. Luego se construyó el castillo adosado a ella. Ocupa una superficie aproximada de unos 1.000 m2. Cuenta con diferentes vanos, saeteras y ventanas de medio punto talladas en sillares. La torre-puerta es del tipo de recodo simple, con un arco semicircular con dovelas al exterior, aunque el interior es un extraordinario arco apuntado de gran amplitud. Conserva las gorroneras y los agujeros para la tranca. En el resto de las torres se conservan algunas bóvedas de crucería, con escudos en el nacimiento de los nervios. Y todas cuentan con múltiples aspilleras, además de vanos modernos. Toda su fábrica es de mampostería, reforzada con sillares en las esquinas, con un sector de tapial en el muro meridional. Las habitaciones o cámaras rodean el patio descubierto, también rectangular, pero está muy transformado debido a la utilización del castillo como viviendas.

 

 

 

Torre Sureste en primer término. Detrás, la torre-puerta.

Puerta en recodo simple, con arco de medio punto al exterior y otro apuntado y muy ancho, en el interior del patio.

 

 

 

Gorroneras de la puerta.

 

 

 

Patio interior.

Perteneció a la Orden de San Juan del Hospital desde la reconquista. Y posiblemente fuera construído para albergar a los comendadores de dicha orden. Posiblemente sea del siglo XIII, aunque algunos autores lo creen del XIV. En 1350 es nombrado por primera vez el castillo, cuando el comendador Arnalt de Bardaxín firmó un documento en el castillo de Añón. Durante la Guerra de los Dos Pedros, el de Aragón mandó abandonar la villa y reforzar el castillo en 1357. A pesar de ello, fue conquistado por los castellanos en 1363, junto con toda la comarca de Tarazona y Borja. En 1707, durante la Guerra de Sucesión, Añón defendió a Felipe V, por lo que fue atacado por los austracistas, quedando el castillo muy deteriorado. Fue rehabilitado durante la primera guerra carlista (1833-39). Tras la Desamortización fue dividido en lotes y convertido en viviendas. Para ello se desmocharon las torres y se cubrieron con tejados modernos y tuvieron lugar innumerables reformas que arrasaron con su valor histórico.

Torre puerta.

Torre Noreste.

 

 

 

 

 

Torre Suroeste.

Torre del Homenaje.