
Junto a la antigua carretera de San Juan, ahora convertida en una vía rápida de cuatro carriles (N-332), enfrente del santuario de la Santa Faz. En el antiguo camino de la Cruz de Piedra. Para acceder hasta ella hay que dirigirse por el carril de servicio. Está incluída en una gran finca llamada Torre Alameda y adosada a una gran casa, pero es perfectamente visible a través de la verja. Dicha finca, pertenece al Conde de Soto Ameno, es decir, de propiedad privada y no se visita.
Fue reconstruída en los años 90 del siglo XX tras presentar un aspecto ruinoso, pero, desde entonces, estuvo abandonada llegando incluso, a perder las ventanas, por las que entraban palomas, el viento y la lluvia. No obstante, ha sido restaurada con buen acierto hace algunos años, tanto la torre como la casa adyacente.

Torre de planta cuadrada (5 m. de lado), con semisótano, tres pisos y terraza rematada por una cornisa a la que se han añadido unas almenillas modernas durante la restauración de los 90. Se alza sobre un plinto. Se sabe que tuvo una campana que fue donada, tras la Guerra Civil, por su propietaria al monasterio de la Santa Faz, al otro lado de la carretera. También puede observarse la caja de la escalera, restos de dos relojes de sol en dos de sus caras, varias ventanas adinteladas y algunas aspilleras
Es obra del siglo XVII. Fue propiedad de los condes de Soto Ameno, origen de su topónimo, cuyas iniciales pueden verse en algunas rejas de la casa. Actualmente pertenece a la familia Ten.