La torre queda en el interior de una parcela de un chalet, como se puede ver en las fotografías con la valla metálica.
A media ladera de un monte en el que se construyó la urbanización Altamira, quedando la torre en el interior de un chalet privado. A pesar de ello es perfectamente visible desde los alrededores.
Parcialmente restaurada.
Torre vigía de planta circular y forma tronco-cónica, con 15 m. de altura y 21 m. de perímetro en su base. Conserva sus almenas con forma de corona. Presenta el acceso algo elevado, algunas saeteras y un balcón, fruto de una desafortunada reforma.
Aunque la construcción actual es árabe, se levantó sobre cimientos romanos, por lo que debió formar parte de la red defensiva de la fortaleza romana de Segorbe.