Castillo de Rocafort

 

 

Oculta entre los pinos se adivina la iglesia, en la pequeña colina donde se levantó la antigua fortaleza de Rocafort.

En el lugar que hoy ocupa la iglesia y el convento, en lo alto de la pequeña colina que se levanta en el centro de la población.

Desaparecido. Fue derribado en época temprana para levantar el templo parroquial. Es posible que se reaprovecharan los materiales.

La población fue fundada con posterioridad a la conquista de Jaime I. Perteneció a Francisca Gamella en el siglo XIV, y más tarde a Mateo Llansol. Fue vendido a los Mercader y luego, en 1527 a Tomás Rabot. En 1610 aparece como señor Cristóbal Muñoz de Funes y, por último, en 1799, se integró en el patrimonio de los barones de Santa Bárbara.