Sus restos se encuentran actualmente bajo el actual Paseo Marítimo, en la zona denominada Mirador del Castillo, en lo alto de la gran roca llamada Puntal de Canfalí, que divide las dos playas, la de Levante y la de Poniente.
Desaparecido. Sus escasos restos fueron arrasados por el fortín y luego tapados por las obras del paseo marítimo.
Desconocemos todo cuanto concierne a su tipología y estructura.
Al parecer, fue obra cristiana. La población sufrió dos terribles ataques piratas berberiscos, el primero hacia 1410 y el segundo en 1448, que asolaron la villa y el castillo. En concreto, en el ataque de 1448, los piratas se llevaron esclavizados a la mayor parte de los habitantes de Benidorm, con lo que el lugar se despobló. Durante el siglo XVI se amplió y reparó el castillo, pero la villa urbana, que había retornado a la baronía de Polop, se encontraba al parecer casi completamente despoblada. Sabemos que en el siglo XVI el castillo se amplió y reparó, concretamente en torno a los años 1530, 1563 y 1575. Pero la pequeña villa en esa época parece que seguía sufriendo un despoblamiento urbano total, como informa en 1574 el beato Juan de Ribera al hablar sólo de la existencia de unas cuantas familias de pescadores sin constituir un hábitat estable.