El río Jalón corta la alineación montañosa llamada la Serratilla, abriendo un camino natural por un desfiladero, muy estratégico durante siglos. Incluso en época moderna se construyó la carretera nacional y las vías del tren en el mismo lugar. Sobre unas peñas sobre el río se alza este castillo, dominando el caserío y controlando el paso. El único punto por el que es accesible es un sendero que nace en la vieja carretera N-II, junto al edificio del balneario.
La torre todavía se encuentra en buen estado, aunque de su interior, tras usarla como palomar, no podemos decir lo mismo. Del pequeño recinto que la rodea, poca cosa queda.
Frente Noroeste.
El castillo, sobre unas rocas, controla el paso del río.
A la derecha de la torre está el estrecho acceso al castillo.
En primer término, el talud de la torre. Detrás, el muro del recinto totalmente degradado.
Castillo roquero de planta irregular y pequeñas dimensiones. Está formado por una gran torre reforzada por un estrecho recinto limitado al escaso espacio existente entre las rocas de la cresta donde se ubica. Todo el lugar es totalmente inaccesible con rocas verticales, excepto en su extremo Noroeste, que es donde se sitúa la torre, defendiendo el acceso. Los muros de la torre cierran el paso de escarpe a escarpe, dejando tan solo un estrecho pasillo en su lado Suroeste, donde debió estar la puerta. Del recinto quedan escasos lienzos y en muy mal estado. La mayoría han caído ladera abajo. Sin embargo, sorprende el buen estado de la torre, conservada íntegra. No obstante, el interior, después de décadas transformada en palomar, deja mucho que desear. Aunque no se puede comprobar, puesto que la torre permanece cerrada por sus propietarios con una puerta metálica y carteles amenazantes.
La torre es de planta rectangular (9 x 6 m) de excelente sillería blanquecina, y con su remate completo, continuo de matacanes, con arquitos semicirculares entre los canes, a modo de corsera, pero sin almenas, con parapeto corrido. Ignoramos las plantas que tiene. Cuenta con varios vanos de diferentes tamaños, aspilleras y ventanucos. La pequeña puerta se abre en el interior del castillo, en su muro Sureste, cubierta con un arco de medio punto dovelado, teniendo la particularidad que la clave se había despegado en el momento de nuestra visita (diciembre 2025).
Frente Sureste.
Aquí vemos el mal estado del recinto. Y detrás, los edificios del balneario.
En 1071 fue conquistado por el Cid y así aparece en el Cantar. En 1120 fue conquistado por Alfonso I el Batallador tras la toma de Calatayud. En 1135 pasó a poder de Castilla tras la invasión de Alfonso VII, dependiendo del arzobispo de Sigüenza que lo gobernó hasta 1139, fecha en la que fue recuperado por Ramón Berenguer IV. Durante la Guerra de los Dos Pedros, fue conquistado por los castellanos en 1361 y 1362, y al recuperarlo, Pedro IV el Ceremonioso puso de alcaide a Pedro de Vidasca en 1366. Entre 1421 y 1454 pasó de nuevo de uno a otro reino hasta que en ese último año se firmó definitivamente la paz entre Aragón, Castilla y Navarra quedando en posesión de Aragón.
La torre parece obra del siglo XIV, muy posterior a la construcción musulmana del castillo.