Casa-fuerte de los Casares

En la margen izquierda del río Córcoles, en el fondo del valle, a unos pocos metros al Norte del castillo, con el que algunos lo confunden. En la tradición popular se lo toma por el palacio de Doña Berenguela.

Muy mal estado, a pesar de que sus muros han sido consolidados para evitar males mayores.

Se trata de una casa fuerte que aún no ha sido excavada en su totalidad. Como elementos defensivos solo se conservan dos aspilleras en el muro Norte. Constituye un conjunto arquitectónico notabilísimo por sus dimensiones y calidad de construcción, conservando en la actualidad lienzos de muros de tapial de cerca de 10 m. de altura. Su estado de conservación a finales del siglo XX era muy precario, por lo que se está llevando a cabo una intervención de consolidación ininterrumpida desde 1999. Las excavaciones arqueológicas en el mismo han permitido conocer hasta el momento gran parte de la planta del edificio, que se encontraba sepultada bajo sedimentos modernos, configurándose como un gran conjunto arquitectónico con planta de tendencia rectangular y compartimentación interna en diversas naves en torno a un espacio central. Diversos autores lo califican como casa-fuerte, como castillo-palacio o como palacio. Lo que sí parece claro es que su construcción es posterior al castillo y que de él se utilizaron sus materiales.

 

 

Las ruinas conservadas se reparten en los dos extremos del edificio, estando desaparecida toda su parte central.

 

 

 

 

Ruinas de la parte Oeste.

 

 

 

Ruinas del sector Este.