Sobre un monte de 1.171 m de altura, a cuatro kilómetros al Oeste del pueblo, justo en su límite municipal y en el interior de una gran finca denominada Hacienda de San Rafael. Su gran altura la convierten en un hito en muchos kilómetros a la redonda. Llegar hasta la torre es sencillo por una buena pista forestal y está señalizado.
Tan solo ha quedado su base maciza. Uno de sus lados se ha desplomado recientemente.
Torre atalaya de planta octogonal y fábrica de mampostería trabada con mortero de cal, levantada sobre una base circular de nivelación hecha de mampostería y con 60 cm de altura. Su altura actual ronda los 4 m que corresponden con la parte maciza de la torre. Por encima de esta zona, habría un habitáculo. Coronando la torre se cree que tendría una terraza con parapeto almenado. En algunos puntos conserva restos del enlucido exterior. Al Este de la torre, a dos metros, había un agujero que pudiera ser un aljibe, pero en el momento de nuestra visita (diciembre 23) estaba acolmatado y no se podía asegurar. En su parte superior tiene el monolito del vértice geodésico.