Se encuentra en el centro neurálgico del pueblo, en la plaza del Doctor Fernández Turégano, entre la iglesia y el ayuntamiento.
Es célebre este edificio porque perteneció a Martínez de Cevallos, aguerrido caballero que escaló los muros del castillo de Alarcón ayudado por dos dagas vizcaínas. Este acto de valor fue determinante para la toma del castillo.
Pero lo que nos interesa a nosotros es la existencia de dos rústicas aspilleras en su fachada.